28 de julio de 2015

Estudio la linea de... (alguien "importante")



Vamos con un tema controvertido, o que al menos algunas personas lo pueden considerar como tal. Nosotros entendemos que no es así y queremos dar nuestro punto de vista sobre una "moda" que lleva ya unos años instaurada en determinadas artes marciales y es la moda de "yo es que estudio/soy alumno la linea de... (alguien "importante" dentro de esa arte marcial)".

Intentaremos explicarlo desde el principio, para aquellos que estén leyendo esto y no sepan de que hablamos. En artes marciales tradicionales o tradicionalistas, tales como Aikido, Kendo y Iaido, se a puesto de moda decir que se estudia lo que vienen siendo el estilo (linea) de un determinado maestro, que en la mayoría de los casos es un maestro de reconocido nivel técnico y prestigio marcial y social dentro de esa arte marcial. Aunque esto también se puede dar en otras artes marciales, como el Karate, Judo... etc. y se esta empezando a dar en el Brazilian Jiu Jitsu también, suelen ser las tres primeras de las que se suele abusar de este término.

Alguno se preguntara que hay de malo pues en afirmar que se sigue un determinado estilo, o a un determinado maestro dentro de un arte marcial y siendo honestos, no hay nada de malo, todo lo contrario, lo normal es que los grandes maestros atraigan a más publico y más aún hoy en día con las facilidades que nos brinda Internet, Youtube, televisión, libros... Es normal y comprensible ver un vídeo de un gran maestro y decir, yo quiero hacer eso también.

El problema viene cuando se engaña, ya sea a uno mismo, ya sea al alumnado, o ambas cosas.
Y nos vamos a explicar, que aquí vienen las curvas.
Intentaremos explicar mediante tres puntos la problemática de este tema.


1. Mi maestro es (NOMBRE IMPORTANTE) 


En el título sustituyamos NOMBRE IMPORTANTE por cualquier gran maestro que se les ocurra y que en nuestro caso no vamos a poner, para que vuele la imaginación y evitarnos problemas. 

Nosotros consideramos a nuestro maestro, a aquella persona con la que más años hemos practicado un arte marcial, aquella personal que en lo personal y técnico siempre ha estado allí para ayudarnos a crecer, que nos conoce y al cual conocemos.

Decir que nuestro maestro es ese señor tan importante, que hemos visto una o dos veces, o que nos da un curso una vez al año, es una falta de respeto a la persona que esta encima nuestro día tras día, semana tras semana corrigiéndonos y que incluso en el caso de que ya no entrenemos más con él, puesto que tenemos nuestro propio grupo o clases, le debemos el respeto de decir que esa persona fue nuestro maestro, y no aquella tan famosa y de cuyo nombre todos conocen.

Si no eres capaz de respetar a tu verdadero maestro, como pretender que te reconozcan y tutelen "los grandes".


2. Usar grandes nombres, como marketing o sello de garantía.


Muchas personas usan grandes nombres de las artes marciales, diciendo que son sus maestros no solo por una sensación o sentimiento de orgullo y respeto por este u otro maestro, algunas personas usan estos nombres como reclamo comercial, pues entienden que así conseguirán más alumnos y su trabajo dentro del tatami se respetara más.

...sinceramente, si necesitas de grandes nombres para avalar tu trabajo, es que quizás necesitas más confianza en ti mismo y en tus propias habilidades, tampoco se trata de creerse el mejor, pero da lo mejor de ti en cada clase y olvídate de mencionar quien te enseño o dejo de enseñarte.


3. Menospreciar a todo el mundo que no pertenezca a tu linea.


Y esto es algo que desde nuestro blog detestamos, pues si normalmente pedimos que todos respetemos el trabajo ajeno y que nos puede gustar más o menos alguna arte marcial o deporte de contacto, no somos quien para criticar el trabajo, sudor y esfuerzo de otras personas, y por lo tanto lo sano es hacer lo que a uno le gusta y como le guste, sin criticar a los demás.

Es triste encima ver como personas de un mismo estilo marcial se critican ya entre si, pues al final esas personas hacen lo mismo. 

Aikido es Aikido. Karate es Karate. Iaido es Iaido... y así con todo.

Que te guste más  un estilo, una linea o un maestro dentro de un mismo estilo, no te legitima a faltar al respetos a tus otros compañeros de artes marciales. Primero intenta respetar y si no consigues tener ese mínimo de educación y cultura, ignóralos y sigue practicando aquello que tanto te gusta. Vive y deja vivir y puede que el tiempo te de la razón... o no, pero seguro que estarás más feliz.





Si lees esto y ves que en tu linea no se cumple ninguno de estos tres puntos, felicidades estas en un buen dojo y tu maestro (o tu mismo si eres el que das las clases) tiene los pies en la tierra y sabe ejercer su profesión de una forma sana y sin engaños en este sentido.

Si ves que cumples algún requisito... y has leído hasta aquí, siempre hay tiempo a cambiar, se honesto contigo mismo he intenta corregir si eres el que das las clases o no aceptar este comportamiento de tu maestro si es el caso.

La educación va de la mano con el respeto y no hay nada más feo que criticar o menospreciar no ya a un practicante marcial, sino a un propio compañero de estilo...


Esperamos que les haya gustado este artículo... normalmente nos gusta más la reconciliación y la educación, antes de decirle a nadie lo que tenga que hacer... pero pensamos que sería un tema interesante a tratar y esperamos que alguno le haya dado que pensar.



20 de julio de 2015

Un gran triunfo del pugilismo canario




Jamás había regresado Canarias con tantos galardones individuales y colectivos en el pugilismo amateur como los que acaba de cosechar en Los Alcázares (Murcia) con motivo de los LXXXVII Campeonatos de España Élite Masculino; los XXV Campeonatos de España Jóvenes; los VI Campeonatos de España Júniors y los VIII Campeonatos de España Élite Femenina. Pero también es verdad que en ninguna otra ocasión, Canarias desplazó el equipo que envió a estas ediciones, compuesto por 22 púgiles y 4 féminas, que lograron 8 medallas de oro; 6, de plata y 7, de bronce, que resulta un balance muy positivo.
En la modalidad de Élite Masculino- antes Séniors- para púgiles comprendidos entre los 19 y 40 años, los máximos galardones lo obtuvieron, el moscaligero Samuel Carmona Heredia, de Las Palmas; y el peso ligero Mustafá Gueye Hernández, de Tenerife. La plata correspondió al superligero grancanario Kevin Tomás Reyes; y a los tinerfeños Romén Jesús Marrero Díaz (semipesado) y Acorán Bolaños Rodríguez (pesado). Alcanzaron la medalla de bronce, los tinerfeños Jacob Barreto Caballero( gallo), Jelday Majli Arzola Galván( medio) y el superpesado Joelmi Miguel Scardigno Curbelo; y el mosca grancanario Aramís del Cristo Torres Santiago. Completaba el equipo de Canarias, el welter John Dicksson Williams Sonde, de Las Palmas.
En la clasificación por equipos, Canarias se posicionó en primer lugar, con 26 puntos, seguida de Madrid (20) y Castilla-León(16), entre otros conjuntos. Era la cuarta vez que Canarias obtenía tal galardón, si tenemos en cuenta sus anteriores cotas: Alicante( 1993), Santander( 1994) y Valencia (2012). Hay que dejar constancia que antaño, Tenerife había obtenido cinco títulos nacionales como equipo y, otros cinco, Las Palmas.
En la modalidad de Jóvenes- antes denominados Júniors_ para boxeadores en edades comprendidas entre los 17 y 18, las medallas de oro fueron para los tinerfeños Josué López Curbelo (superligero) y Cyrano Lorenzo Romero (medio); y para el grancanario Jacinto Daniel Hormiga Giménez( pesado). La plata correspondió a dos púgiles de Las Palmas, Jonathan Gabriel Santana Santana( gallo) e Iván Medina Sosa( semipesado). Completaba el equipo de Canarias de Jóvenes, Maverick Agustín Hernández Martín (mosca), Oswaldo García Hernández (ligero) y Ángel Yarnick Cabrera Suárez (welter), los tres de Las Palmas. En la clasificación por equipos, Canarias, con 21 puntos, logró el liderato, seguida de Andalucía (9) y Murcia( 8), entre otros conjuntos. Por novena vez, Canarias obtenía tal triunfo. Y recordar que Tenerife, en Valladolid, y en el año 1989, fue la federación vencedora en los Nacionales antes de integrarse, como equipo, con la actual vitola de Canarias.
En la modalidad de Júniors -antes denominados Cadetes-para boxeadores en edades comprendidas entre los 15 y 16 años, las medallas de oro recayeron en el tinerfeño Alberto Aladren Expósito (moscaligero) y el grancanario Francisco Valdivia Medina( medioligero); y el bronce, para Miguel Ángel Hernández Pérez (gallo) y Kevin Brian Monzón Caicedo( pluma), ambos de Las Palmas. Madrid se alzó con el título por equipos, seguido de Castilla-León, Valencia y canarias. La única vez que Canarias obtuvo el título por equipos fue en los Nacionales celebrados en Haría (Lanzarote), en 2006.
En la modalidad Élite femenina, la máxima distinción la logró Davinia Macarena Pérez Valencia(peso pluma); la plata, Rocío del Pilar Alarcón Madiavilla( superligero); y el bronce, Saray Noemí Umpierrez Santana (ligero). Completaba el equipo de féminas, todas ellas de Las Palmas, Yolanda Guacimara Ramos Jofre( moscaligero). Por equipos, Castilla-León obtuvo el liderato, seguida de Madrid, Andalucía. País Vasco y Canarias que, hasta la fecha, no ha obtenido un título colectivo.
En Los Alcázares( Murcia) compartieron estos triunfos los preparadores Jonay Negrín González y Manuel Povedano Doncel, de Tenerife; José Delgado Bolaños y Yeray García Baez, de Gran Canaria, así como el equipo de árbitros-jueces formado por Raquel Torres Hernández y Vanesa María García Bolaños, de Tenerife, y Juan Agustín Ramírez Romero, de Las Palmas. También acudieron a la cita campeonil , como delegado de equipo, Antonio Pulido González, presidente de la Federación de Las Palmas; y Juan Tomás Rodríguez Tejera, presidente de la Canaria, a los que hay que felicitar por tales logros, al igual que al presidente de la Federación Tinerfeña, Luis Vizcaya Larios.


Antonio Salgado Pérez
ansalpe38@hotmail.com
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17 de julio de 2015

11 Desafio en la playa 2015


Desafío en la playa es una competición de grappling que se celebra en la playa de Melenara (Gran Canaria), una competición que con su edición numero once, se convierte en un clásico ya del verano.

Una forma distinta de competir y de ver una competición.